RIO DE JANEIRO – Puede ser que los últimos meses sean recordados como el momento en que la inteligencia artificial (IA) predictiva se generalizó. Si bien los algoritmos de predicción han estado en uso durante décadas, el lanzamiento de aplicaciones como ChatGPT3 de OpenAI, y su rápida integración con el motor de búsqueda Bing de Microsoft, puede haber abierto las compuertas en lo que respecta a la IA fácil de usar. En cuestión de semanas tras su lanzamiento ChatGPT3 ya había atraído a100 millones de usuarios mensuales, muchos de los cuales, sin duda, ya han experimentado su lado oscuro: desde insultos yamenazas hasta desinformación y una capacidad demostrada para escribircódigos maliciosos.
RIO DE JANEIRO – Puede ser que los últimos meses sean recordados como el momento en que la inteligencia artificial (IA) predictiva se generalizó. Si bien los algoritmos de predicción han estado en uso durante décadas, el lanzamiento de aplicaciones como ChatGPT3 de OpenAI, y su rápida integración con el motor de búsqueda Bing de Microsoft, puede haber abierto las compuertas en lo que respecta a la IA fácil de usar. En cuestión de semanas tras su lanzamiento ChatGPT3 ya había atraído a 100 millones de usuarios mensuales, muchos de los cuales, sin duda, ya han experimentado su lado oscuro: desde insultos y amenazas hasta desinformación y una capacidad demostrada para escribir códigos maliciosos.