fischer181_DELIL SOULEIMANAFP via Getty Images_USmilitarymiddleeast Delil Souleiman/AFP via Getty Images

Estados Unidos sigue siendo indispensable

BERLÍN – Además de una pandemia, esta década ya se ha visto amenazada por el retorno de las rivalidades entre grandes potencias. Pocos acontecimientos podrían ser más riesgosos para la paz mundial. Tres guerras mundiales –dos calientes y una fría- durante el siglo veinte resaltaron el peligro de la competencia geopolítica de gran escala.

Para muchos observadores, la era de las rivalidades entre grandes potencias parecía haber llegado a su fin con la disolución de la Unión Soviética. Pero ese supuesto demostró ser uno de los errores más serios del periodo posterior a la Guerra Fría (un tiempo abundante en equivocaciones y malentendidos garrafales). Los aires de imperio global de las elites políticas estadounidenses, de que se había llegado a un momento histórico verdaderamente unilateral, no se pudieron sostener. Tampoco la “paz eterna” esperada por los europeos tras el “fin de la Historia” anunciado en 1989, cuando la democracia liberal occidental y la economía de mercado supuestamente triunfaron sobre todas las demás alternativas.

Por el contrario, las décadas transcurridas desde el fin de la Guerra Fría han estado marcadas por un debilitamiento del orden internacional. Como la última potencia global restante, Estados Unidos se agotó en guerra sin sentido en Mesopotamia y el Hindu Kush, y desde entonces ha adoptado una postura cada vez más aislacionista.

https://prosyn.org/q1iC8ghes