boskin82Jacques LangevinSygmaSygma via Getty china russia Jacques Langevin/Sygma/Sygma via Getty Images

La apuesta fallida por las reformas en Rusia y China

STANFORD – La invasión a Ucrania por parte del Presidente ruso Vladimir Putin y el creciente autoritarismo del Presidente chino Xi Jinping han despertado tardíamente a gran parte del planeta sobre el fracaso de la apuesta geopolítica hecha por los Estados Unidos y sus aliados hace una generación. La necesaria respuesta a las sombrías nuevas realidades de hoy refleja los costes de haberla perdido. Todo cambiará, desde las alianzas de seguridad, los presupuestos militares y el comercio internacional a los flujos financieros y las políticas energéticas y medioambientales.

La apuesta que los países occidentales hicieron en los años 90 fue que la integración de Rusia y China a la comunidad internacional a través del comercio y el intercambio de bienes y servicios aceleraría sus reformas políticas y económicas. Nadie esperaba que se convirtieran en democracias capitalistas de la noche a la mañana, pero se suponía que una mayor prosperidad limaría gradualmente sus aspectos más ideológicos y autoritarios hasta lograr el reemplazo de la confrontación por la cooperación.

Para entender el contexto en el que hizo esta apuesta, tenemos que ir a 1980, cuando EE.UU. todavía sufría los efectos de la estanflación y la trágica conclusión de la Guerra de Vietnam. La Guerra Fría estaba en pleno apogeo, enfrentando al capitalismo contra el comunismo y a la democracia contra el totalitarismo. Las guerras títeres surgían con regularidad y siempre estaba presente el serio riesgo de una confrontación nuclear.

https://prosyn.org/x9jjkqdes