ROMA: ¿Cuál será el futuro de las relaciones trasatlánticas? Esa pregunta surge con cada cambio de administración en los EU. Dado que desde principios de 1970 existen preocupaciones sobre una “creciente brecha atlántica”, resulta tentador imaginar que las relaciones trasatlánticas continuarán más o menos en el mismo tenor que antes. Sin embargo, lo cierto es que tanto los EU como la Unión Europea están evolucionando rápidamente siguiendo sus respectivos caminos; por ello, en ambos lados del Atlántico existe el reto de manejar una relación cada vez más compleja.
ROMA: ¿Cuál será el futuro de las relaciones trasatlánticas? Esa pregunta surge con cada cambio de administración en los EU. Dado que desde principios de 1970 existen preocupaciones sobre una “creciente brecha atlántica”, resulta tentador imaginar que las relaciones trasatlánticas continuarán más o menos en el mismo tenor que antes. Sin embargo, lo cierto es que tanto los EU como la Unión Europea están evolucionando rápidamente siguiendo sus respectivos caminos; por ello, en ambos lados del Atlántico existe el reto de manejar una relación cada vez más compleja.