DHAKA – La crisis financiera internacional de los últimos años dejó al descubierto la existencia de graves defectos en el sistema financiero internacional. El propósito original de los mercados de crédito era proveer de capital a empresas y compañías, pero unos pocos individuos los manipularon para ponerlos al servicio de un objetivo egoísta: obtener rendimientos irrealmente altos mediante maniobras de ingeniería financiera. Esto trajo sufrimiento a los habitantes de los países desarrollados (basta pensar en los extraordinarios niveles de desempleo en países como España y Grecia), pero también a incontables millones de personas en los países en desarrollo, que no tuvieron responsabilidad alguna por la crisis.
DHAKA – La crisis financiera internacional de los últimos años dejó al descubierto la existencia de graves defectos en el sistema financiero internacional. El propósito original de los mercados de crédito era proveer de capital a empresas y compañías, pero unos pocos individuos los manipularon para ponerlos al servicio de un objetivo egoísta: obtener rendimientos irrealmente altos mediante maniobras de ingeniería financiera. Esto trajo sufrimiento a los habitantes de los países desarrollados (basta pensar en los extraordinarios niveles de desempleo en países como España y Grecia), pero también a incontables millones de personas en los países en desarrollo, que no tuvieron responsabilidad alguna por la crisis.