NUEVA YORK – La posibilidad de la llegada al poder de un gobierno populista y euroescéptico en Italia ha concentrado los pensamientos de los inversores como pocos otros acontecimientos este año. El diferencial de rendimiento, o spread, entre los bonos italianos y alemanes se ha ampliado marcadamente, lo que indica que los inversores ven a Italia como una apuesta más riesgosa. Y los precios de las acciones italianas han caído -en especial en las acciones de los bancos nacionales, la mejor muestra del riesgo país- mientras que las primas de seguro contra un incumplimiento de deuda soberana se han incrementado. Existen inclusive temores de que Italia pueda desatar otra crisis financiera global, especialmente si una nueva elección se convierte en un referendo de facto sobre el euro.
NUEVA YORK – La posibilidad de la llegada al poder de un gobierno populista y euroescéptico en Italia ha concentrado los pensamientos de los inversores como pocos otros acontecimientos este año. El diferencial de rendimiento, o spread, entre los bonos italianos y alemanes se ha ampliado marcadamente, lo que indica que los inversores ven a Italia como una apuesta más riesgosa. Y los precios de las acciones italianas han caído -en especial en las acciones de los bancos nacionales, la mejor muestra del riesgo país- mientras que las primas de seguro contra un incumplimiento de deuda soberana se han incrementado. Existen inclusive temores de que Italia pueda desatar otra crisis financiera global, especialmente si una nueva elección se convierte en un referendo de facto sobre el euro.