BERLÍN – Estamos presenciando cambios profundos en la forma como funciona la economía mundial. A consecuencia del ritmo y la intensidad cada vez mayores de la mundialización y la digitalización, cada vez más procesos económicos tienen una dimensión internacional y un número cada vez mayor de empresas están adaptando sus estructuras a los sistemas jurídicos nacionales y extranjeros y a las legislaciones tributarias.
BERLÍN – Estamos presenciando cambios profundos en la forma como funciona la economía mundial. A consecuencia del ritmo y la intensidad cada vez mayores de la mundialización y la digitalización, cada vez más procesos económicos tienen una dimensión internacional y un número cada vez mayor de empresas están adaptando sus estructuras a los sistemas jurídicos nacionales y extranjeros y a las legislaciones tributarias.