OXFORD – En las democracias desarrolladas hoy, el liderazgo político está cada vez más a disposición de quien lo quiera tomar. Los votantes, claramente cansados del status quo, quieren cambios en la cúpula. Esto hace que incluso a los establishments de los partidos más importantes les resulte difícil instalar líderes de su preferencia.
OXFORD – En las democracias desarrolladas hoy, el liderazgo político está cada vez más a disposición de quien lo quiera tomar. Los votantes, claramente cansados del status quo, quieren cambios en la cúpula. Esto hace que incluso a los establishments de los partidos más importantes les resulte difícil instalar líderes de su preferencia.