LONDRES – Casi la mitad de la población mundial acudió a las urnas en 2024. De ahí que se haya catalogado a este año como un súper año electoral, haciendo que muchos expertos advirtieran de la llegada de una avalancha de desinformación política. Después de todo, la inteligencia artificial generativa ha hecho posible que cualquiera, en cualquier lugar, pueda producir imágenes y videos ultrafalsos (“deepfakes”) que parecen reales. Nunca los malos actores antidemocráticos han tenido herramientas tan poderosas para socavar unas elecciones libres y justas.
LONDRES – Casi la mitad de la población mundial acudió a las urnas en 2024. De ahí que se haya catalogado a este año como un súper año electoral, haciendo que muchos expertos advirtieran de la llegada de una avalancha de desinformación política. Después de todo, la inteligencia artificial generativa ha hecho posible que cualquiera, en cualquier lugar, pueda producir imágenes y videos ultrafalsos (“deepfakes”) que parecen reales. Nunca los malos actores antidemocráticos han tenido herramientas tan poderosas para socavar unas elecciones libres y justas.