OXFORD – La economía política libanesa está paralizada. Los líderes políticos del país no asumirán el compromiso con las reformas económicas que este necesita, porque perderían poder. Por buenos motivos, la mayoría de los análisis publicados sobre el Líbano hacen referencia a problemas como la corrupción y la decadencia institucional, pero a la mayoría de los comentaristas se les escapa el papel que desempeñan las partes interesadas externas, que no encuentran demasiados motivos para promover cambios al statu quo disfuncional.
OXFORD – La economía política libanesa está paralizada. Los líderes políticos del país no asumirán el compromiso con las reformas económicas que este necesita, porque perderían poder. Por buenos motivos, la mayoría de los análisis publicados sobre el Líbano hacen referencia a problemas como la corrupción y la decadencia institucional, pero a la mayoría de los comentaristas se les escapa el papel que desempeñan las partes interesadas externas, que no encuentran demasiados motivos para promover cambios al statu quo disfuncional.